Los activos argentinos volvieron a caer con fuerza este viernes en los mercados internacionales, en sintonía con una rueda global atravesada por la incertidumbre económica y tensiones geopolíticas. Las acciones y ADR de empresas nacionales que cotizan en Nueva York sufrieron bajas de hasta 5%, afectadas por la creciente aversión al riesgo en los mercados emergentes.
La volatilidad en Wall Street se incrementó tras una serie de señales contradictorias. Por un lado, Chris Waller, gobernador de la Reserva Federal de Estados Unidos, planteó la posibilidad de un recorte de tasas en julio, lo que abrió expectativas en algunos sectores. Sin embargo, la incertidumbre por la política monetaria se combinó con nuevos episodios de tensión en Medio Oriente, lo que debilitó la confianza de los inversores.
En ese contexto, las acciones tecnológicas sufrieron un fuerte retroceso. Un informe de The Wall Street Journal reveló que Estados Unidos planea revocar exenciones clave para que empresas de chips operen con China, lo que generó un desplome de compañías como Nvidia, que cayó 1,2%.
Los principales índices bursátiles cerraron en terreno mixto: el Nasdaq bajó 0,5%, el S&P 500 retrocedió 0,2% y el Dow Jones subió 0,1%.
Por el lado argentino, predominaron las bajas. Las acciones de Transportadora Gas del Sur cayeron 4,9%, Edenor retrocedió 4,3% y Grupo Galicia perdió 3,9%, entre otras.
“La pausa del norte se traslada a los activos domésticos, en especial a los ADR que vienen más flojos, más allá de la expectativa que despiertan las señales que pudieran llegar el martes desde las definiciones de MSCI”, explicó el economista Gustavo Ber.
Los bonos globales argentinos bajo ley extranjera también retrocedieron, con una baja promedio del 0,3%. En Buenos Aires no hubo operaciones por tratarse de un feriado local.
Geopolítica en el centro de la escena
La Casa Blanca confirmó que el presidente Donald Trump tomará una decisión en las próximas dos semanas sobre una posible intervención militar en el conflicto entre Irán e Israel, lo que mantiene a los mercados en vilo. La incertidumbre se agudizó después de que se filtrara que el mandatario había postergado una acción directa contra Irán.
Sin embargo, también se abrió una ventana para la diplomacia: funcionarios iraníes deslizaron que podrían discutir límites en el enriquecimiento de uranio, mientras el canciller Abbas Araqchi se encuentra en Ginebra para mantener conversaciones con representantes europeos.
Petróleo en baja y tensión por la inflación
En paralelo, los precios del petróleo bajaron con fuerza ante la expectativa de un giro diplomático. El Brent cayó 2,3% a 77,01 dólares el barril, mientras que el West Texas Intermediate (WTI) cerró por debajo de los 75 dólares.
A nivel interno de EE.UU., persisten las preocupaciones por la inflación. Aunque la Fed mantuvo las tasas sin cambios esta semana, las advertencias sobre una aceleración de los precios siguen latentes. “Los mercados están buscando el próximo catalizador alcista; hasta entonces, los inversores siguen en modo de espera”, señaló Adam Sarhan, CEO de 50 Park Investments.